¡Amos, que nos vamos!

Queridos amiguitos:

NO soy vegano. Vamos a empezar por ahí. Me he tirado 37 años largos alimentándome de animales muertos, entre otras cosas.

Por cosas de la vida (pesadillas, reflexiones, lecturas, amigas y amantes veganas, de todo un poco y vaya usted a saber) hace un mesecito escaso tomé la decisión de no comer más cadáveres. Sigo comiendo unos pocos huevos y algo de queso. Mi excusa es: La Mancha es mu dura. Y de momento quiero seguir disfrutando de cañas y botellines con su pincho.

Desde hace cosa de un año llevo experimentando en mi cocina cositas veganas, primero para las visitas y luego para mí. Y quiero compartir este viaje de descubrimiento y experimentación con quien quiera pasar por aquí a echar un ojo.

No pretendo hacer un blog de cocina con recetas estupendísimas, ni descubir la pólvora. Hay mil blogs por ahí para aprender cosas difíciles. Yo iré colgando las cosas que vaya haciendo y que crea que valen la pena, comentando la jugada.

Habrá sección dedicada a las recetas tradicionales manchegas que son, y siempre han sido, veganas. Así como para algunas adaptaciones de la tradición.

Nada más, y nada menos. Empezamos.